A pesar que en el 2015 la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria, no pudo demostrar que el etoxiquin, un aditivo alimentario, tenga un efecto nocivo sobre la salud animal, humana, y el medio ambiente. El 12 de Junio del 2017 se publicó en el Diario Oficial de la Unión Europea, un reglamento de ejecución para la suspensión del uso del etoxiquin en alimentos de todas las especies y categorías de animales.

Esto se hizo porque la p-Fenetidina, una impureza obtenida en el proceso de producción del etoxiquin, se reconoce como un posible agente mutagénico. El acuerdo limitó el uso del etoxiquin en vitaminas y pigmentos hasta fines del 2018, y para productos marinos, como las harinas y aceites de pescado, calamar, etc., para finales del 2019. Ambas fechas se cumplieron ya por lo que desde Enero pasado la UE no recibe productos que contengan etoxiquin.

Fuera de la UE ninguna otra autoridad en el mundo ha prohibido el uso de etoxiquin en alimentos de animales.

En Ecuador, un país con una importante producción de harinas y aceites de pescado, el cambio se ha producido en mas del 90%, solo las empresas que pueden clasificar sus producciones de acuerdo a los destinos, aplican varios tipos de antioxidantes según el destino, sin embargo los problemas operativos los están llevando a usar antioxidantes sin etoxiquin, por lo que desaparecerá en breve este producto del mercado.

La razón por la cual un antioxidante primario, que recibió aprobación de la FDA en 1959 se mantenga por 60 años como el líder del mercado, es que de los 5 antioxidantes primarios mas importantes conocidos, fue que su costo por dosis siempre fue el mejor del mercado, y eso lo mantuvo, con más de 1.000 TMde ventas anuales en Sudamérica.

Hoy los consumidores deben tomar un incremento en el tratamiento antioxidante de sus productos, puesto que el siguiente producto que tiene mejor costo por dosis es el ButilHidroxi Tolueno (B.H.T.), pero su formula original es en polvo, a diferencia del etoxiquin que su forma química es líquida, lo que le permite una mejor dispersión sobre el producto a tratar. En consecuencia la industria tuvo que hacer un desarrollo tecnológico y llevar el B-H.T. a la forma liquida, con una concentración del 19-22%.

Tecnológicamente el etoxiquin tiene una mayor velocidad de acción antioxidante, porque su tensión superficial es menor que la del B.H.T., pero es más inestable y su protección antioxidante dura menos que el B.H.T., que tiene mayores fuerzas de retención en los radicales libres en la cadena de carbonos de los aceites y grasas. Lo anterior permite que los productos tratados con este antioxidante soporte temperaturas manteniendo su acción de protección.

En los tratamientos antioxidantes con etoxiquin, las dosis a usar no eran tan críticas para harinas de pescado con diferentes contenidos de EPA y DHA, la velocidad de acción le permitía neutralizar rápidamente la oxidación. Esto no sucede con el B.H.T., que para compensar esto, la dosis entre harinas de bajo y alto contenido de EPA y DHA llegue a ser hasta de un 50% más, para lograr su eficacia.

Adilisa desarrolló en el 2012 un antioxidante llamado Greenox como parte de una respuesta técnica ante la posibilidad del retiro del etoxiquin del mercado. Greenox hoy sustituye al etoxiquin en todas las aplicaciones en donde este se usaba. Las dosis generalmente han sido 4 veces mayores a las del etoxiquin, exceptuando las harinas de alto contenido de grasas poli-insaturadas, a las cuales hay que desarrollar en cada caso la dosis óptima de aplicación, porque los sistemas de producción de las plantas son distintas. En estas harinas la dosis puede llegar a ser hasta 6 veces la que se utilizó con el etoxiquin.

Los sustratos formados por aceites, grasas, vitaminas y pigmentos, contienen cadenas de carbonos que contienen radicales libres, en donde temporalmente se alojan moléculas de antioxidante impidiendo que las moléculas de oxigeno formen enlaces permanentes con los carbonos, llamados peróxidos. Estos peróxidos también pueden unirse entre si formando cetonas y aldehídos, que afectan las propiedades organolépticas de los productos finales.

Sin embargo de este cambio de antioxidantes, ya existen cuestionamientos de todos los antioxidantes primarios conocidos al día de hoy, casos relacionados con cambios mutagénicos productores de cáncer en los animales, nada de esto comprobado, pero la amenaza está ahí.

Qué nos quedará en el futuro si Organismos Mundiales los prohíben?, tal como pasó ahora con el etoxiquin. La industria desde ahora está trabajando en desarrollos de nuevos antioxidantes naturales, basado en tocoferoles, en extractos de romero, extractos de orégano y otros. Hoy existen productos con estos ingredientes usándose en la industria de alimentos de mascotas, a elevadísimos costos por dosis, y altas dosis, amparados en el concepto de producto natural.

 

 

 

CEO

Ing. Jorge Susá Talenti

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